Oh! Dios padre celestial, hace casi un año que el honorable alcalde Gilberto Serulle, a través del Ing. Josué Brito, uno de sus colaboradores más cercanos, anunciaba con bombos y platillos el inicio de lo que una comunidad pujante lleva reclamando por casi 30 años. Tres (3) meses era el tiempo que marcaba para la inauguración, una navidad de ensueño les veía venir a miles de moradores y soñadores de lo prometido por alguien considerado hijo de dicha comunidad, como lo es el honorable Alcalde.
Se nos fue esa Navidad, nos llegó el Carnaval, vimos pasar la Semana Santa y casi arribamos a los 12 meses del inicio de dicha promesa y apenas hemos visto levantar las primeras líneas de block que soportaran las estructuras metálicas que algún día, ojalá y que llegue ese día, darán por finalizado el sueño esperado.
Padre que estas en los cielos, ilumina la mente del ejecutivo municipal para que cumpla con su promesa de campaña que hizo a los jóvenes meritorios del referido sector, para que los mismos puedan realizar sus actividades deportivas.
Guíalo por el camino del bien y recuérdale que el Ensanche Bermúdez necesita hoy más que nunca dicha instalación para continuar desarrollando talento, tal y como lo ha hecho durante su fructífera historia.
Ilumínalo para que desembolse los chelitos que hacen falta para la culminación del sueño anhelado y evitar que continúe creciendo el flagelo de las drogas y otros vicios que atacan a la juventud de dicha comunidad.
Mientras llega la iluminación el Ensanche Bermúdez seguirá prolongando y conformándose con las tres líneas de block en las que descansa su sueño anhelado.