Para la segunda mitad del siglo XVIII el progreso ecocómico de las colonias inglesas fue detenido por el despotismo ilustrado del rey Jorge III de Inglaterra, sobre todo a partir de la Guerra de los Siete años (1756-1763), pues éste buscó limitar la libertad de las colonias para conseguir una mejor explotación de la riqueza colonial.
Algunas de las leyes que buscaban limitar las libertades de los pobladores de las Trece colonias son las siguientes:
Ley de Acuartelamiento (1765), por la cual se impuso la obligación de dar hospedaje a los soldados venidos de Inglaterra.
Ley de la Melaza (1764), impedía la producción de azúcar en las colonias
Ley del Timbre (1765), obligaba a los colonos a usar papel sellado -que era monopolio de la Corona- para todo documento legal, panfleto o periódico
Leyes de impuestos a productos importados como vidrio, papel, plomo y té (1767)
La revolución de Independencia de EUA es una revolución burguesa. En ésta las clases altas y medias dedicadas principalmente al comercio exterior buscaron terminar con el sistema proteccionista de la Monarquía inglesa que limitaba su libertad de comerciar, pues para poder realizar esta actividad requería el pago de numerosos impuestos o aranceles.
George Washington
Parte de los reclamos de los colonos norteamericanos serán que las leyes de impuestos establecidas en Inglaterra no podían ser válidas hasta que no fueran aprobadas por representantes de su población en el Parlamento. Los colonos ilustrados como Thomas Jefferson o Benjamin Franklyn defendieron sus intereses con base en los conceptos postulados por Locke y Rousseau, así como los términos comprendidos en la Enciclopedia.