Para las dominicanas éste es ya su mejor resultado en unos Juegos Olímpicos, y supera el balance de Atenas 2004, cuando terminaron en undécima posición en su primera participación.
En cuartos de final le espera a las caribeñas nada menos que Estados Unidos, favorita al oro y que se ha asegurado el primer lugar del Grupo B con una jornada de antelación.
La República Dominicana cumplió hoy los pronósticos y no tuvo ninguna dificultad en superar a Argelia, un rival netamente inferior, pero no por ello las chicas dirigidas por el técnico brasileño Marcos Kwiek salieron relajadas.
Argelia mostró que no es una selección tan bisoña como Gran Bretaña, anterior rival de las dominicanas, y que está en los Juegos Olímpicos por méritos propios, pero en ningún momento estuvo a la altura de un equipo que sabe mover la pelota y que tiene buenas rematadoras, como es el dominicano.
La resistencia argelina duró hasta la mitad del primer set, con el marcador 12-11, y a partir de ahí, a la selección dominicana le valió con un poco de orden y ganas para despegar hasta diez puntos en el marcador.
El seleccionador Kwiek aprovechó para rotar el banquillo, para dar minutos a las jugadoras que han participado menos hasta ahora y dar descanso a su principal estrella, Bethania de la Cruz, sin que se resintiera el dominio de su equipo ni un instante.
Con siete puntos de bloqueo apenas en el segundo set, ese parcial fue un camino de rosas para la República Dominicana y un calvario para las argelinas.
La diferencia entre ambos equipos era abrumadora y, de forma casi inevitable, el partido perdió toda la tensión de sus primeros minutos y fue languideciendo rápidamente.